Desde siempre Tú...

 

Tú, siempre has sido tú y siempre serás tú.
Eres el motor de mi vida, el que pone rumbo a mi vida, el que guía a mis sentidos, y por más que te necesite, no estas...
Estuviste una vez conmigo, fue tan efímero...
Y desde entonces te busco y no te encuentro ....

Te necesito como el niño a su mañana.
Cada día me cuesta más sobrevivir sin ti... y por más que me esfuerzo en repetir que no te necesito, que estoy bien sin ti, no puedo engañar a mi interior que cada noche se revela mi subconsciente y me muestra, que toda esta farsa es sólo una carcasa de protección contra el exterior...
Y hoy es uno de esos días en los que ya no puedo más, mi interior ha estallado, ha roto a llorar, unas lágrimas amargas, unas lágrimas de soledad, unas lágrimas de ansiedad...
Mi alma húmeda por las lágrimas arropa a mi pobre corazón, roto, dolido, desolado...
Y son mis ojos los que revelan tan triste momento, llenos de lagrimas, lagrimas contenidas en el lagrimal, lagrimas que de repente estallan como un manantial, recorren mis mejillas y llegan hasta mis labios, los deja húmedos, suaves, vulnerables....
En la noche, al caer rendida en el sueño, te busco pero no te encuentro...

Tengo tanto amor para darte... que si no te encuentro pronto mi corazón estallará...
se que existes, se que me buscas, se que nos encontraremos, solo que todavía nuestros caminos no se han cruzado.
Te sueño, te pienso, te busco, te anhelo, te espero... y al fin te encuentro...